Feeds:
Entradas
Comentarios

Posts Tagged ‘García Montero’

Hoy concluye la Feria del Libro de Madrid y hoy termina también la cobertura especial que le ha dedicado Winston Manrique en el blog Papeles perdidos de Babelia, el suplemento cultural de El País. De sus siempre acertadas iniciativas, destaco este repertorio de sugerencias de lectura en vídeo, una colección que tiene como protagonistas nombres tan meritorios como los que aparecen en la lista de abajo.

Hace unos días fue el turno de Luis García Montero y la inevitable -y aun así  magnífica- Canción del pirata de Espronceda. Observen que el tomito de referencia es la antología clásica de Juan Bergua y disculpen el lapsus en la lectura del poeta granadino, pero se trata de un poema que dicho de memoria se carga fácilmente de sonoridad hueca y así, leído con más calma, parece que vuelve a su esencia primera.

Otras recomendaciones interesantes son las siguientes:

Todos ellos están en la videogalería dedicada al evento: Los vídeos de la Feria. ¿Alguien más se atreve a dejar aquí registro de su texto iniciático?

Read Full Post »

Mario Benedetti (1920-2009)

Mario Benedetti (1920-2009)

Si de clásicos hispánicos vivos y actuales hablamos, Mario Benedetti, desaparecido ayer sólo en su forma mortal, es uno de esos nombres esenciales que concitan la admiración y la estima en ambas orillas del Atlántico. Poeta del compromiso, de la lucha por la libertad y la más alta exigencia estética, de la justicia y el verso claro, ayer nos abandonó a los 88 años, después de una larga enfermedad y un lento declive, pero su voz resuena aún juvenil y alegre desde tantas grabaciones en que recita sus poemas, muchas de ellas disponibles en Internet. Tenemos algunas muestras en Palabra virtual, en la Biblioteca de autores contemporáneos del Centro Virtual Cervantes y en A media voz.

Hoy intelectuales de todo el mundo lo homenajean y el Gobierno de Uruguay reserva una sala del Palacio Legislativo para velar su cadáver. Hoy todo son flores y loas a su figura, pero no están tan lejanos los tiempos de la dictadura que lo condenó a un largo exilio, ni los del relativo ninguneo al que lo sometieron algunos colegas por sus ideas políticas o por su supuesta y excesiva “sencillez”.

Afortunadamente, el legado de Benedetti es indiscutible: ensayos, poemas, cuentos, novelas… Una obra vasta e imprescindible, variada y de calidad, que está ahí entera para nosotros y que desde hace décadas tiene el aplauso cálido y numeroso de críticos, lectores y artistas de toda condición. Aplausos, versiones y homenajes como los que ha recibido desde el mundo del cine y la música. Recordemos por un lado el film El lado oscuro del corazón (1992) de Eliseo Subiela, diversos documentales y dos versiones de su novela La tregua; y por el otro, las canciones compuestas sobre sus versos por Daniel Viglietti (A dos voces), Joan Manuel Serrat (El sur también existe), Nacha Guevara, Pedro Guerra, Emiliano Valdeolivas y tantos otros.

No me resisto tampoco a citar el artículo que le dedica hoy el poeta Luis García Montero en el diario El País. Se titula Textos como espacios públicos y en él explica muy bien cómo la poesía de Benedetti supo llegar a tantos lectores. Entresaco tres fragmentos:

“La sencillez del verso de Mario invitaba a dar una imagen suya ingenua, simple, marcada por la falta de complejidad. Sin embargo, sus apuestas surgieron de un conocimiento profundo de la cultura occidental.” […]

“Es verdad que hay mala poesía nacida de la simplicidad, pero en los desvanes contemporáneos ocupa más lugar la quincallería de las rupturas llamativas, los experimentalismos y los sacerdotes de la élite. La poesía de Mario Benedetti, sin embargo, consiguió entrar en la educación sentimental de muchos lectores, y supo hablarle a la gente del amor, del miedo, de la melancolía, de la soledad, sentimientos que, por fortuna, no son patrimonio de los poetas, sino de los seres humanos en general.” […]

“Algo que también le agradecieron siempre sus lectores fue la necesidad de llevar su compromiso cívico más allá de los dogmas y de las consignas. Sabía que era obligado tomar postura contra el capitalismo real, igual que contra el socialismo real. Pero lo más importante es que no perdió nunca en los debates políticos su capacidad de sentir. No permitió que las ideas se separaran de la vida, mezcló la poesía amorosa con la conciencia cívica, y supo intentar en sus poemas, lo mismo que en narraciones como La tregua (1960), una épica de los seres comunes. Los ciudadanos normales tienen las mismas ilusiones y las mismas inquietudes que los héroes, porque los héroes no son más que personas normales puestas por la historia en una situación en la que se debe demostrar la dignidad humana. De eso trataban los libros de Mario. Así fue su vida.”

Adiós, Mario. Adiós al hombre comprometido con los que sufren, alerta desde su inteligencia y su sensibilidad, consciente y cercano, poeta íntegro y radical en su defensa de la dignidad humana, de verso y ritmo natural en su cadencia y en su vida. Nos vemos.

Extra

 

Escena de El lado oscuro del corazón en que el personaje de Oliverio recita el poema No te salves a Ana, su amante, al reencontrarla en el cabaret donde trabaja. Poco después, el propio Benedetti, caracterizado como un viejo poeta alemán, recita en este idioma su poema Corazón coraza a una bella pero ausente prostituta.

Read Full Post »